Las ventas de agosto estuvieron un 50% por debajo de los volúmenes máximos alcanzados en plena cosecha. Al parecer, los productores decidieron no vender la soja disponible o vender lo mínimo, y esperar una mejora futura en los precios de la soja.
Sin embargo, para tener mayor liquidez, o hacer caja, los productores sí están vendiendo el maíz.
“Los productores resguardan su soja como reserva de valor porque la demanda de la industria aceitera está activa todos los días del año, en cambio, los exportadores de soja poroto están activos compradores principalmente en los tres primeros meses de la cosecha”, informó la Cámara de la Industria Aceitera de la República Argentina (CIARA).
La agroindustria liquidó u$s16.091 millones en los primeros ocho meses del año y se espera que los productores de soja aceleren las ventas en estos meses.
En agosto, las agroexportadoras liquidaron u$s2.451 millones, un 40% por encima del mismo período del 2023, aunque 6% debajo de julio.
En el año, la agroindustria ingresó un 9,4% más que en el mismo período de 2023, según la Cámara de la Industria Aceitera (CIARA) y el Centro de Exportadores de Cereales (CEC).
Hasta mediados de agosto, se desprendieron de 26,1 millones de toneladas, el 52% de las 50,5 millones de toneladas cosechadas.
El año pasado, a misma altura, habían vendido 11,9 millones de toneladas, el 48% de la producción, y en 2022, 22,3 millones de toneladas, el 51% de la trilla.
La oleaginosa había tocado los u$s370 durante la rueda de este martes, su cota más alta desde el 7 de agosto. Sin embargo, este miércoles el contrato CBOT cae 1% y la tonelada se ubica en los u$s362,84.