Aunque el gobierno nacional que encabeza Javier Milei comenzó con un intenso proceso de desregulación de la economía liberando los precios de distintos rubros que hasta su llegada se encontraban limitados, al menos tres aumentos en sectores clave sobre los que todavía pesa algún tipo de control le impondrán más presión al bolsillo de todos los argentinos.
Tras el pésimo dato de la inflación de diciembre, que alcanzó la cifra de 25,5%, los analistas prevén una inflación de dos dígitos para enero y el segundo mes del 2024 volverá a estar marcado por incrementos que ayudarán a mantener la fuerte escalada de los precios.
La principal incógnita en materia de aumentos es qué pasará con el boleto de los micros y los pasajes de tren en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) y La Plata, ya que el Gobierno tenía previsto aplicar una fuerte suba desde el 1° de febrero, pero la Justicia ordenó suspender el incremento posponiendo la audiencia pública prevista para convalidar la suba.
En cualquier caso, hasta el momento los siguientes son los aumentos confirmados para el mes próximo:
Luego del mega Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) lanzado por el presidente, en el que liberó el congelamiento de precios, las empresas de medicina prepaga informaron que las cuotas tendrán un aumento de entre el 27% y 29% promedio en febrero.
De acuerdo con el DNU, el Gobierno ya no tendrá que autorizar los aumentos en las cuotas y las empresas no tendrán tope para la diferencia entre el precio del plan para gente más joven (más económico) y el resto. En tanto, las compañías están evaluando la implementación de planes "low cost" para evitar una pérdida masiva de afiliados.
Aunque el DNU derogó la Ley de Alquileres, los contratos en curso deben ser respetados hasta su fecha de vencimiento y esto significa que mientras el acuerdo esté vigente todos los términos y condiciones se aplicarán hasta el momento de su finalización. En ese sentido, aquellos que alquilaron bajo aquella normativa tendrán que afrontar subas cercanas al 147,1% anual en los valores a pagar. De esta manera, febrero anota otro récord para el Índice de Contratos de Locación (ICL), que realiza el Banco Central de la República Argentina (BCRA) sobre la base de la inflación y los salarios.
Esta fórmula se aplica únicamente a los alquileres iniciados entre el 1° de julio de 2020 y el 17 de octubre de 2023, previo a la sanción de la nueva ley de alquileres con ajustes semestrales a través del índice Casa Propia.
Las empresas comenzaron a anticipar a sus clientes que, a partir de los primeros días de febrero, llevarán a cabo el segundo ajuste de tarifas del 2024 con un incremento que puede ser superior al 25%, según el servicio y la operadora.
En febrero se espera que las tarifas de gas lleguen con un nuevo esquema tarifario como consecuencia de la quita de subsidios que aplicará el Gobierno para reducir el déficit fiscal. Hasta el momento la Secretaría de Energía no confirmó de cuánto será la suba, pero las empresas del sector solicitaron incrementos que podrían ser de hasta un 697%.
Algo similar podría ocurrir con las tarifas de luz. En febrero se espera que tengan lugar las audiencias públicas para definir los nuevos aumentos del servicio, que iría en línea con los del gas.
Los combustibles, por su parte, podrían verse sujetos a un nuevo incremento puesto que el 1° de febrero vencerá el congelamiento de los impuestos postergados en noviembre por el extitular del Palacio de Hacienda, Sergio Massa, que implicaba una suba extra de $70 por litro o 25% directo al público.
La actualización de los impuestos impactará de lleno en los precios en los surtidores. El último ajuste del gravamen se aplicó en el segundo trimestre de 2021 y fueron suspendidos en siete oportunidades durante la gestión de Alberto Fernández. Con Milei en la Casa Rosada todo indica que no se seguirá en la misma línea.