Los días previos a la final de la Copa Libertadores entre Boca Juniors y Fluminense se están viviendo con mucha intensidad en las calles de Río de Janeiro, donde miles de simpatizantes del equipo argentino viajaron en las últimas horas y coparon las principales playas de la ciudad costera de Brasil. Luego de ataque organizado de la barra de Flu a los hinchas argentinos que se registró a la tarde en Copacabana, y que terminó con una estampida, gases lacrimógenos y balas de goma, por la noche volvieron los incidentes cuando la policía carioca buscó desalojar la arena y ya se registraba la presencia de nuevos agresores, que llegaron a atacar a los visitantes.
Pasadas las 21 horas las imágenes de violencia contra los simpatizantes argentinos volvieron a registrarse con la represión policial que los obligó a desalojar las playas de Copacabana, cuando tras el primer conflicto había llegado la calma y los aficionados de ambas escuadras convivían en paz. Fue ahí que regresaron los conflictos y, tras la explosión de fuegos artificiales, llegó el accionar de las fuerzas de seguridad, que obligó a la gente a retirarse en medio de un nuevo desbande.
Pero los incidentes no fueron solo en las playas ya que también circularon imágenes de nuevos ataques pirañas de hinchas de Fluminense contra los de Boca Juniors. En uno de los videos se pudo ver cómo entre varios brasileños le pegaron a un simpatizante argentino.
Los testimonios de los incidentes continuaron y también hubo hinchas de Boca Juniors que fueron detenidos por la policía. Se pudo ver a tres de ellos que fueron esposados y subidos a un ómnibus de la fuerza de seguridad. Mientras tanto, uno de los efectivos le apuntó con su arma a otros hinchas argentinos que se ubicaron del lado de la playa.
Más tarde las imágenes del caos mostraron cómo continuó el accionar policial sobre los simpatizantes argentinos, aunque también los efectivos se ocuparon de replegar a los torcedores del Fluminense que se acercaron a la zona donde estuvieron los hinchas de Boca Juniors.
En una larga noche que se espera en Río de Janeiro, en ESPN informaron que hubo una reunión en el hotel donde se hospeda Boca Juniors, en la que participaron los responsables de la delegación del equipo argentino, un representante del consulado argentino, un emisario de la Conmebol, otro de la AFA, y faltó un representante de la policía local. La preocupación creció en los jugadores del plantel Xeneize ya que este jueves llegaron todos sus familiares.
Ante el clima de tensión y con el fin de evitar nuevos hechos de violencia, la misma cadena deportiva señaló que la delegación de Boca Juniors también habló con el embajador argentino en Brasil, Daniel Scioli, a quien le manifestó su preocupación por los incidentes y le pidió intervención para resguardar la integridad de los hinchas argentinos. Cabe recordar que este viernes está convocado un banderazo de la parcialidad visitante al que se podrían sumar torcedores del Flamengo, archirrival de Fluminense.