Durante el mes de enero, las autoridades del Gobierno nacional informaron acerca de la implementación de una modificación en los criterios de segmentación de la tarifa del servicio de gas natural y una “nueva conceptualización” de los subsidios, que impactará en el precio final de la tarifa con aumentos del 33?% durante tres meses seguidos a partir de febrero.
“La segmentación actual se mantiene hasta el 1° de abril de 2024, el nuevo esquema de subsidios entrará en aplicación a partir de dicha fecha, previa audiencia pública que se realizará al efecto”, explicaron las autoridades.
En tanto, ahora se espera que el secretario de Energía explique en detalle qué es lo que ocurrirá con las tarifas y cómo impactará en los bolsillos de los trabajadores la actualización del último servicio público que mantenía los valores de mediados del año pasado. Lo que resta saber es si se avanzará con la quita total de los subsidios o no.
En caso de que esto ocurra, se estima que el gas podría llegar a aumentar un 743?%. En concreto, las tarifas de abril podrían generar un gran impacto en los bolsillos de los trabajadores y trabajadoras de la República Argentina.
Según un informe, que fue elaborado por la consultora Economía y Energía, se estima que los usuarios de distintos niveles de ingresos se verán afectados de manera diferente. De esta forma, los hogares de altos ingresos podrían enfrentar un aumento del 422?%, los de ingresos medios del 666?%, y los de bajos ingresos del 697?%.
La actualización tarifaria se dará en conjunto con la eliminación de la segmentación tarifaria y la puesta en marcha de la Canasta Básica Energética (CBE), “con el objetivo de otorgar subsidios exclusivamente a los sectores más vulnerables”, según señaló el Gobierno.
En tanto, según se detalló, la nueva canasta apuntará a “determinar los ingresos del grupo conviviente” y que “cubra necesidades básicas de las personas con distintos tipos de consumo en las zonas del país”.