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Definir Empresa puede llevarnos varias líneas en este artículo, pero no obstante es prioritario ofrecerles a ustedes, lectores, las variantes más precisas que brindan las fuentes más certeras:
La empresa es una organización: dotada de una estructura interna según determinada relación de autoridad o con una «jerarquía», es decir, con una función directiva o empresarial, por la que pretende la consecución de unos objetivos, normalmente, la obtención del excedente o beneficio empresarial.
Para la RAE una empresa es una unidad de organización dedicada a actividades industriales, mercantiles o de prestación de servicios con fines lucrativos.
En ambos, claros y precisos conceptos o significados, estructura organizativa se desprende de la misma.
Usted, querido lector, piense algunos segundos en el concepto e imagínese parte, ingresa a diario, comparte con una organización, desarrolla la actividad y mensualmente recibe su retribución, sueldo o salario.
Ahora, si la descripción sería no ir a ningún lado, no compartir organizacionalmente nada, más que un globo, y mensualmente pagar, ¿Qué concepto es?
Con denuncias y órdenes de disolución, ReMax subsiste con un sistema de franquiciado para que las personas puedan presentarse, abonando un Feed mensual de uso y llegando a ese nivel a partir del pago de sumas en concepto de capacitación e ingreso.
Sí, leyó bien, para vender casas, los “Agentes” pagan.
La justicia indicó meses atrás que ReMax hace creer que el corredor inmobiliario es un comerciante y no un profesional y engaña al asegurar que defiende a miles de pymes cuando en realidad es una marca extranjera que desconoce las leyes laborales, tributarias y de colegiación del país.
La Inspección General de Justicia (IGJ) determinó también que debería iniciarse un proceso judicial de disolución y liquidación de Re/Max Argentina por considerar que la empresa realiza un ejercicio ilícito de la actividad inmobiliaria en el marco de lo dispuesto en los artículos 18° y 19° de la Ley 19.550 de Sociedades Comerciales.
La marca es ni más ni menos que una sublicencia, una franquicia con herramientas y prácticas, para muchos el UBER de las inmobiliarias, claro que utilizar un servicio de alquiler de vehículos con chofer es muy distinto a dejar los ahorros de toda una vida.
La resolución 350 de la IGJ presenta un punto clave en el que se centra la discusión: ¿es lícito dar una franquicia para una actividad reglamentada por leyes que exigen título universitario y matrícula? Los colegios inmobiliarios que regulan la actividad y gran parte de los referentes inmobiliarios afirman que una profesión como el corretaje inmobiliario no es franquiciable.
La autoridad máxima de control societario pide la disolución y considera que es ilícita porque es como si una empresa estuviese anotada como productora de zapatos y vende remedios", gráfica Jorge Irigoyen, abogado del Colegio Único de Corredores Inmobiliarios de la Ciudad de Buenos Aires (Cucicba), la entidad que realizó la denuncia contra ReMax en la IGJ que derivó en la resolución.
En síntesis no es cierto que presten un servicio. Otorgan franquicias para el ejercicio de la actividad. Son como una máscara para que la actividad la desarrollen otras personas. Lo hacen de manera indirecta creando sujetos que sí la desarrollan. La ley prohíbe esa ficción. La actividad de ReMax es cuestionable desde distintos ángulos: comerciales, publicitarios, profesionales, administrativos, impositivos, laborales e incluso penales".
La carrera de martillero público está profesionalizada, regulada por leyes nacionales, provinciales y quien ejerce la actividad de compra y venta de una propiedad de terceros, debe cursar una carrera universitaria y obtener una matrícula. Ser martillero público es una actividad profesional no comercial. Las profesiones no se franquician.
Y el sujeto de la discusión va más allá de la contra presentación de argumentos, hay que centrarse en lo cotidiano: el esfuerzo de años, el ahorro de su vida, ¿a quien se lo entregas?
La marca del globo promueve “inmobiliarias” sin empleados sin ningún costo para la franquicia principal, como si viniera un médico extranjero sin matrícula, le das la franquicia y te ópera.
En varias provincias argentinas, la franquicia no puede desembarcar, ante las reiteradas denuncias de los profesionales del sector.
Porque esto no se trata de libre mercado, se trata de saber cómo seguir siendo respetuosos de la confianza de los clientes, en un sector donde desde allí se basan la mayoría de las operaciones.
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