En las últimas horas trascendió la intención del Gobierno de Javier Mileide eliminar por completo los subsidios al transporte en toda el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), lo que elevaría el precio del boleto mínimo de los micros a $1.500.
La medida ya fue dispuesta para el interior del país y ahora se avanzaría en la región, que también incluye a La Plata, Berisso y Ensenada. La novedad hizo que escale el conflicto entre la gestión nacional y los gobernadores, con los que ya mantiene un fuerte enfrentamiento a raíz de la fallida discusión de la Ley Ómnibus en el Congreso de la Nación.
Esta nueva disposición involucraría a las líneas interjurisdiccionales que van desde distintos puntos del conurbano a la Ciudad de Buenos Aires, las cuales concesiona el gobierno nacional.
De efectivizarse esta medida, en el sector aseguran que la tarifa podría trepar a los $1.500. Por eso están alertas en la provincia de Buenos Aires, territorio que ya inició el reclamo administrativo y no descarta recurrir a la Justicia por la quita del subsidio al transporte en el interior, una estrategia sobre la que ya avanzan numerosos intendentes de grandes centros urbanos del país, según publicó el portal La Política Online.
"La quita del Fondo Compensador es una tragedia para el interior bonaerense, de un plumazo duplicaron el boleto en cada jurisdicción", dijo al respecto el ministro de Transporte bonaerense, Jorge D'Onofrio.
Con el anuncio de la eliminación de los subsidios al transporte del interior, en el AMBA la inquietud de los transportistas se disparó a la par de la discusión paritaria con la UTA y el retraso en la actualización de fondos que motivó la carta documento a Caputo por parte de las cinco cámaras del sector. Frente a la complejidad de una posible quita total a las líneas bajo concesión nacional en el AMBA, en la Provincia advierten sobre un escenario de "conflicto social".