En el marco de su primer viaje internacional como Presidente de la Nación, Javier Milei expuso ante diversos funcionarios y empresarios en el marco del Foro Económico Mundial llevado a cabo en Davos, Suiza.
El discurso del mandatario comenzó afirmando que “Occidente está en peligro” por “aquellos que, supuestamente deben defender sus valores y se encuentran cooptados por una visión del mundo que conduce al socialismo, y en consecuencia a la pobreza”.
En referencia a los principales líderes del mundo que se encontraban presentes, el jefe de Estado argentino apuntó a que “han abandonado el modelo de la libertad, por distintas versiones, de lo que llamamos colectivismo” e insistió en que “nunca son la solución a los problemas que aquejan a los ciudadanos”.
El Presidente se manifestó en defensa del capitalismo, que “generó una explosión de riqueza desde el momento que se adoptó como sistema económico”, y “lo que se observa es que el crecimiento se viene acelerando a lo largo de todo el período”.
En esta línea, concluyó que, “lejos de ser la causa de nuestros problemas, el capitalismo de libre empresa, como sistema económico, es la única herramienta que tenemos para terminar con el hambre, la pobreza y la indigencia, a lo largo y a lo ancho de todo el planeta. La evidencia empírica es incuestionable”.
Milei consideró que “la doxa de izquierda atacó al capitalismo por una cuestión de moralidad” y sustentó que la “justicia social no aporta al bienestar general” de las poblaciones: “La justicia social no es justa, es violenta. El Estado se financia a través de impuestos que se cobran de manera coactiva”, afirmó.
Avanzando en su discurso, continuó señalando que el problema “es que la justicia social no solo no es justa, sino que tampoco aporta al bienestar general”, e insistió en su condición de idea “intrínsecamente injusta, porque es violenta”, y sobre esto avaló que el Estado se financia a través de impuestos y “los impuestos se cobran de manera coactiva”.
“¿Cómo puede ser entonces que, desde la academia, los organismos internacionales, la política y la teoría económica se demonice un sistema económico que no solo ha sacado de la pobreza más extrema al 90?% de la población mundial, y lo hace cada vez más rápido, sino que además es justo y moralmente superior?”, se cuestionó el jefe de Estado ante los presentes.
Milei realizó críticas a la “agenda del feminismo radical” y consideró que plantea una “pelea ridícula y antinatural entre el hombre y la mujer” y que solo devino en “mayor intervención del Estado”.
Asimismo, reiteró su desacuerdo con la agenda medioambiental y se refirió al aborto: “Sostienen que los seres humanos dañamos el planeta y que debe ser protegido a toda costa incluso llegando a bregar por mecanismos de control poblacional o en la agenda sangrienta del aborto”, advirtió el mandatario.
Para concluir se dirigió a los economistas “neoclásicos que salgan de la caja” y sostuvo que “el empobrecimiento que produce el colectivismo no es una fantasía ni tampoco fatalismo”, sino “una realidad que los argentinos conocemos muy bien hace por lo menos 100 años”.
Por último, el Presidente envió “un mensaje para los empresarios” pidiéndoles que “no se dejen amedrentar ni por la casta política ni por los parásitos que viven del Estado” y aseveró que “nadie les diga que su ambición es inmoral”. El discurso de Milei cerró asegurando que “a partir de hoy cuentan con Argentina como aliado inclaudicable”.
El Presidente Javier Milei mantuvo una audiencia con la directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Kristalina Georgieva, en el Foro de Davos, para dialogar sobre el programa económico argentino y ratificar el ajuste llevado a cabo para “terminar con la inflación” y las negociaciones del acuerdo anunciado la semana pasada por el ministro de Economía, Luis Caputo.
Por su parte, Georgieva elogió al equipo técnico, que lideró Caputo, durante las negociaciones para alcanzar el Staff Level Agreement (SLA) en una reunión que duró, aproximadamente, 25 minutos.
El mandatario argentino estuvo acompañado por el jefe de Gabinete, Nicolás Posse, el ministro de Economía, Luis Caputo, la secretaria general de la Presidencia, Karina Milei, y el embajador designado en Estados Unidos, Gerardo Werthein, y estuvo presente la directora gerente del FMI, Gita Gopinath.
Otra de las citas llevadas a cabo por Milei en su visita a Suiza fue la que mantuvo con el canciller británico, David Cameron, donde se fijó Malvinas “como un punto de agenda”. Duró menos de una hora y, según sostuvo el jefe de Estado argentino, “fue una reunión excelente, muy cordial. Hablamos de profundizar los vínculos comerciales, del apoyo que nos van a dar en el FMI y cómo promover las inversiones inglesas en Argentina”.
La reina Máxima de los Países Bajos fue otra de las referentes mundiales visitadas por Javier Milei. La argentina asistió al Foro de Davos en su calidad de defensora especial del secretario general de las Naciones Unidas para las Finanzas Inclusivas para el Desarrollo (Unsgsa), cargo que desempeña desde 2009 y desde donde trabaja en colaboración con los sectores público y privado para promover y ampliar la inclusión financiera a nivel global y nacional.